y mis días.
De qué color mi piel
y mis cabellos.
¿Sabré cómo me llamo,
cómo se dice amor
o cuanto te quiero?
Cómo olerá recién
llovido el cielo.
¿Seguirá siendo azul
pasadas ya las horas
y los días dados?
Cómo será la vida
sin la vida.
¿Habrá otra vez
un tiempo de barajas
y de dados?
O será quizá después
de ayer,
todo ya pautado,
Un sucesión cruelmente feliz
de días sin cuento,
Un paraíso uniformemente
uniformado.
¡Como sería sin ti, mujer!
Un infierno,
infinitamente disimulado.
Luis de Pablos
Precioso.
ResponderEliminarHe disfrutado mucho en esta tarde de fin de semana con esta entrada, con tu voz, y el poema...
ResponderEliminarUn beso enorme.
Precioso poema . He disfrutado mucho, tienes una voz muy linda. Besos.
ResponderEliminarCon esta voz las letras se subliman.
ResponderEliminarNo conocía a Luis de Pablos, pero
ResponderEliminares un magnífico poema, gracias por compartir.
que tengas un feliz fin de semana.
un abrazo.
Hola Beatriz: tienes mi permiso para todo lo que quieras, es un honor para mi... Un abrazo. Gracias.
ResponderEliminarQueridos amigos, muchas gracias por vuestros comentarios, es un honor teneros cerquita.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Si bebemos del mismo pozo
ResponderEliminarsomos hermanos de agua.
Si respiramos del mismo viento
somos hermanos de aire.
Si miramos la misma luna
es que vivimos
bajo el mismo Cielo....
Muchas gracias por recrear mi poemita de esta manera tan bella, Beatriz.
ResponderEliminarUn beso, con todo mi cariño.
Luis de Pablos