Mi Mundo Cambió
By Victor Iglesias Gois (abimis)
Con la
serenidad de aquél que no necesita nada, mis horas transcurrían con una plácida
calma pocas veces interrumpida por algún que otro movimiento en mi cuerpo que
hacía aumentar mi comodidad.
No tenía ninguna duda, ¡Era feliz! y poco importaba aquella penumbra que mis ojos percibían de tanto en tanto, o que mi mundo se limitara a lo que me rodeaba
No tenía ninguna duda, ¡Era feliz! y poco importaba aquella penumbra que mis ojos percibían de tanto en tanto, o que mi mundo se limitara a lo que me rodeaba
¿para qué querer conocer lo
desconocido si quizás no me daría las sensaciones que podía disfrutar ahora?
Así, entre dormitar y despertarme corría el tiempo, y aunque parecía que este bienestar sería eterno, algo que no podía precisar rompía esa dulce monotonía y comenzaba a hacerme sentir una extraña sensación. Poco tardé en darme cuenta que mi mundo estaba cambiando.
Los movimientos que antes me acomodaban, se producían más seguidos y ya comenzaban a molestarme, produciendo un estremecimiento en todo mi ser.
Sin saber como detener el caos que afectaba mi mundo perfecto, solo me quedaba esperar a que todo pasara, respirando aliviado al retornar a mí la calma.
Pero mis temores no eran infundados, aquel día los movimientos eran más fuertes que de costumbre, y más seguidos que otras veces, hasta que sentí que algo se había roto, y por allí se escapaba mi felicidad.
Traté de ir tras ella, pero algo me retenía en el mismo lugar, y las paredes de mi mundo comenzaban a apretarme más y más, ¡sentía miedo!, después un fuerte empujón me arrojó no sé hacia donde...
Una luz brillante me impedía abrir los ojos, y una sensación de ahogo hacía que mis pulmones parecieran estallar, entonces un fuerte chasquido me hizo toser, y grité...
Ahora ya todo era inevitable...
Así, entre dormitar y despertarme corría el tiempo, y aunque parecía que este bienestar sería eterno, algo que no podía precisar rompía esa dulce monotonía y comenzaba a hacerme sentir una extraña sensación. Poco tardé en darme cuenta que mi mundo estaba cambiando.
Los movimientos que antes me acomodaban, se producían más seguidos y ya comenzaban a molestarme, produciendo un estremecimiento en todo mi ser.
Sin saber como detener el caos que afectaba mi mundo perfecto, solo me quedaba esperar a que todo pasara, respirando aliviado al retornar a mí la calma.
Pero mis temores no eran infundados, aquel día los movimientos eran más fuertes que de costumbre, y más seguidos que otras veces, hasta que sentí que algo se había roto, y por allí se escapaba mi felicidad.
Traté de ir tras ella, pero algo me retenía en el mismo lugar, y las paredes de mi mundo comenzaban a apretarme más y más, ¡sentía miedo!, después un fuerte empujón me arrojó no sé hacia donde...
Una luz brillante me impedía abrir los ojos, y una sensación de ahogo hacía que mis pulmones parecieran estallar, entonces un fuerte chasquido me hizo toser, y grité...
Ahora ya todo era inevitable...
¡Había nacido!...
Victor Iglesias Gois (abimis)
Beatriz una cosa te comento, hay veces, que según el color o incluso letra que utilices cuestan "una jarta" poder leer aquello que nos pones, aunque la musicalidad de tu voz ayude.
ResponderEliminarUn abrazo.
Mi querido y apreciado amigo,
Eliminartienes toda la razón y no eres el primero que me lo dice. Sinceramente, antes de publicar siempre compruebo que se lee... Verás, desde que tengo el blog he recuperado a la niña que llevo dentro y juego a colorear y buscar fotos, sorprenderos... bueno, y no me resisto a poner color! Jooo, se que debería volver al manida Arial y al negro pero NO ME GUSTA!!!!
Bueno, veré de ser más prudente y que se pueda leer mejor.
Un abrazo mega grande.
Buenas amiga Beatriz, ¿sabes? jamas creo haber escuchado algo tan bonito y tan bien expresado a cerca del nacimiento, lo escuché una y otra vez y si tuviera hoy tiempo no se las veces que lo escucharía, es fantástico.
ResponderEliminarMi enhorabuena a ese pedazo de escritor, que me encanta leerlo y como no a Ruth y a ti amiga Beatriz por esta maravilla con la que nos deleitais
Un beso desde
Las cositas del rincon de Dolores
Como autor del texto quiero agradecer profundamente tu comentario y me siento orgulloso de haberte dado un grato momento, gracias
EliminarVictor Iglesias Gois
Buenas tardes Beatriz, no sabes lo feliz que me hace conocer autores tan hermosos y textos tan bellos, expuestos en tan hermosa voz y con la musicalidad y la imagen tan perfecta que sabe escoger Ruth.
ResponderEliminarOs felicito a los tres.
Besos. Rosa.
Y este autor es felíz por el comentario que has hecho, gracias
EliminarVictor Iglesias Gois
Muy bonito, y enhorabuena al bebé y a los padres, en este caso al autor que ha parido la obra.
ResponderEliminarBesos Beatriz.
Gracias por tu enhorabuena
EliminarVictor Iglesias Gois
Beatriz y Ruth me encanta la intimidad y el cariño con que seleccionáis los textos para el blog, son preciososssssssssss..... La prosa de Víctor engancha, nos acaricia, nos traslada inmediatamente, nos coge de la mano, no es una virtud fácil, y él lo consigue, Víctor enhorabuena, y Beatriz preciosa, preciosa interpretación como siempre, saludos
ResponderEliminar, chiquilla, me dejas sin habla, me atrapas ufffffffffffff
Gracias por tu comentario
EliminarVictor Iglesias Gois
Precioso, encantador.
ResponderEliminarOjalá algún día me toque a mí :)
Buen Jueves, bss
Clsro que si, todo llega...
EliminarVictor Iglesias Gois
Me ha encantado, Beatriz. Muy buena elección.
ResponderEliminarGracias Ruth por el tema musical que es digno de lo que se está leyendo.
Y las mayores felicitaciones para el autor, Víctor Iglesias, porque hay mucha ternura en este texto. También un poco de misterio que se descubre al final y que hace, si cabe, que guste más dicho texto.
Un abrazo a los tres de Mos desde la orilla de las palabras.
Retribuyo el abrazo, gracias
EliminarVictor Iglesias Gois
Que pasada!!! me emocionaste, tanto el contenido como tu narraci'on, preciosa!!!
ResponderEliminarUn abrazo guapas
El autor del contenido te agradece el comentario
EliminarVictor Iglesias Gois
Después de leer y escuchar el sorprendente final, ha sido inevitable (y agradable, por supuesto) volver a empezar. Un relato maravillosamente descrito.
ResponderEliminarFelicitaciones a los tres por tan buen trabajo.
Besos.
Gracias por tu felicitación
EliminarVictor Iglesias Gois
¡¡¡Que lindo!!! me ha sorprendido el final de este bello cuento. Besos a las
ResponderEliminardos.
Me alegro de haberte sorprendido, gracias
EliminarVictor Iglesias Gois
Realmente bonito, me ha encantado, una bonita manera de explicar como viene un baby al mundo y además de una forma hermosa... porque era feliz estando en el vientre y le sueltan a un mundo del que no sabe nada.
ResponderEliminarUn besazo y felicidades al autor.
Me alegro que te encante mi texto, gracias por comentar tu sentimiento
EliminarVictor Iglesias Gois
¡Qué boníto relato del nacimiento de un ser..!
ResponderEliminarY que deliciosamente declamado por tu voz de Ángel
un beso Beatríz
Maribel
El autor del texto te agradece tu concepto
EliminarVictor Iglesias Gois
Feliz alumbramiento, como una sorpresa que nace con la parsimonia de los día y va creciendo y creciendo hasta independizarse en un ser genuino. Muy hermoso.
ResponderEliminarGracias por tu comentario
ResponderEliminarVictor Iglesias Gois
Enhorabuena al creador de este nacimiento.
ResponderEliminarSaludos Pilar...
Gracias Pilar
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